Descripción del proyecto
¡Cristo ha muerto!
Un estremecimiento de las entrañas de la tierra conmovió un día al mundo antiguo.
Los árboles gimieron en los bosques, agitando sus melenas de hojas, como plañideras desesperadas; un viento fúnebre rizó los lagos y la superficie azul y luminosa del mar clásico que había arrullado durante siglos en las playas griegas los diálogos de los poetas y los filósofos. Un lamento de muerte rasgó el espacio, llegando a los oídos de todos los hombres. «¡El gran Pan ha muerto!…»